Anoche vislumbramos, ya iniciada,
la sempiterna Chinatown.
Clásico como era, la proyectaban
en esa sección de los unes que se inventaron en la 2, los Clásicos.
No era nuestra
intención volver a verla, ya lo habíamos hecho varias veces, desde hace años,
nos gustó en su momento, en fin, no estamos muy inclinados a ello.
Sin embargo,
una vez conectamos la cadena 2, nos encontramos al en esta ocasión mesurado
Jack Nicholson, ya con su marca o señal pituitaria, un aparatoso esparadrapo
blanco cubriéndola toda ella, en un paraje semidesértico. Estaba descubriendo
el fraude millonario de las conducciones de agua para suministro de la ciudad
angelical.
Y ya seguimos, aplastados casi a
la poltrona, visionando la indagaciones del detective.
Reparto
Jack Nicholson: J. J.
"Jake" Gittes
Faye Dunaway: Evelyn Cross
Mulwray
John Huston: Noah Cross
Perry Lopez: el teniente Lou
Escobar
Al poco de seguir
el film, parece haber un acercamiento más personal, íntimo todavía no, entre
Nicholson y su partenaire, Mulwray-Dunaway.
Simbolismo del cuerpo:
Como muchas
veces estamos persiguiendo este simbolismo corporal, centrado en el elemento podológico,
ya de entrada nos vino a la mente la imagen de Nicholson-Gittes esparadapado
en otra parte corporal, la nariz.
Aquí ya no
podíamos hacer nada, sólo constatar esa señal o marca del protagonista, su
herida en la destacable pituitaria. Además, con
las gafas de sol que usualmente lleva, teníamos al perfecto enmascarado.
Resulta
curioso ver como un recurso tan estrambótico y aparatoso como el despampanante esparadrapo
blanco reluciente que porta el personaje en la película, lo hayamos aceptado los
espectadores sin maryor reparo. Quizás fue motivo de discusión en algún momento
antes de decirse por ello.
Lo cierto es
que, como es un recurso frecuente de siempre, el caballero, herido doquiera que
fuese, en un momento determinado es auxiliado y socorrido por la dama.
Es un momento de acercamiento que
propicia la atracción sensual.
Y, en efecto, Mulwray-Dunaway
le quita el esparadrapo, creemos recordar, o es él. “Dios mío, no creía que
fuera tan grave”.
Ese esparadrapo,
a lo que se ve, funcionaba como una especie de máscara que ocultaba algo de la verdadera
personalidad del Nicholson. Especialmente su vulnerabilidad.
Aunque su
figura cínica, distante y descreída, no se resiste a reconocerlo.
Empezar la
curación de la nariz, tocarlo ella con unas guatas e iniciar el acercamiento
sensual y carnal fue todo uno.
En verdad que
los dos actores se abrazan y besuquean como auténticos desesperados de amor o
liberación.
La siguiente
escena, hay una obvia elipsis, ahora ya no lo hacen así, tras la elipsis
se los ve a los dos charlando desnudos y relajadamente en la cama que han
compartido. Fuman un cigarro, hacen algunas intimidades, aunque Nicholson-Gittes
ha vuelto a su postura descreída y de vuelta de todo, incluso en el amor.
LA MUERTE ANUNCIADA:
como
en los buenos relatos de la épica clásica, es uno de las características de Homero
que los alumnos deben saberse para las pruebas, encontramos el de la muerte
anunciada.
Se produce precisamente en esta
escena después de la elipsis del encuentro amoroso.
- ¿Y qué
pasó con ella al final? ¿Murió?
Nicholson no
responde, deja la respuesta en sin contestar, con un silencio bastante elocuente.
Y, sí como
veremos, el final de la película, final seco, rápido, hasta estúpido, digamos,
es la respuesta en imágenes, pospuesta, a esta respuesta que ya suponíamos qué
respuesta suponía.
Chinatown.
Toda esta cuestión del antiguo amor que Nicholson había tenido había surgido a
raíz de la evocación de Chinatown.
- Trae mala
suerte. Es un lugar donde puedes esperar que surja cualquier cosa. Como tú, le
dice Nicholson a Dunaway en ese diálogo tan íntimo que lo oímos todos los
millones que en ese momento visionamos el film. Un lugar maldito.
Ya tenemos, como
en la antigua tragedia clásica, el peso de la atmósfera, los lugares más
o menos dañinos y peligrosos, como en el Romanticismo. Solo que aquí se han
trasladado al ámbito urbano, a un barrio en concreto, Chinatown, el barrio
chino.
EL diálogo original
dice así:
EVELYN: I want to know about you.
GITTES: Not now.
E: You really don´t like to talk
about the past, do you?
G: I´m tired.
E: No. Why does it bother you to
talk about it?
G: It bother everybody that Works
here.
E: Where?
G: Chinatown. Everybody. To me ,
it was just bad luck.
E: Why?
G: You can´t always tell what´s
going on. Like you.
E: Why was, um… Why was it bad
luck?
G: I was trying to keep someone
from being hurt. I ended up making sure that she was hurt.
E: Cherchez la femme. Was ther a
woman involved?
G: Of course.
E: Dead?
En la escena final del film, esta
muerte preanunciada o anunciada, tiene su resolución.
En una suma de acciones
precipitadas, Evelyn y su hermana-hija salen en el coche del lugar. Intentan
detenerla. El ayudante de Escobar da un tiro mortífero.
“La
historia se repite”, son las palabras de Nicholson-Gittes dice en ese
momento, cuando constata el desenlace.
https://www.youtube.com/watch?v=PkgXBD6wULs
En la versión original dice algo
como “It´s no posible”, parece oírsele.
https://www.youtube.com/watch?v=TjSshSvQWQA
Consultando el
guion original, no observamos que Gittes-Nicholson diga “la historia se
repite”, como en la versión española.
En el guion,
las últimas palabras las pronuncia el amigo, Walsh, que lo saca de allí, a
instancias del detective Escobar.
Through the crowd noises, Walsh can be heard saying, "Forgetit,
Jake. It's Chinatown."
THE
END
“Olvídalo, Jake. Esto
es/ así es Chinatown”.
El fatum
trágico es ha revelado demoledor e inexorable.
La muerte anunciada, propia del genero épico clásico, esta muerte anunciada de forma indireta, en la escena amorosa entre Gittes y Mulwray, con aquella pregunta de Mulwray, ¿Muerta?, no contestada por Gittes, tienen aquí su correlato y solción final
PATROCLO ANUNCIA LA PRÓXIMA MUERTE
DE HÉCTOR:
Uno de los
ejemplos más claros de este recurso, el de la muerte anunciada, característico
del género épico, se ve en la Ilíada. es el anuncio que el
moribundo Patroclo le hace a su vencedor el troyano Héctor.
Y dijiste con
lánguida voz, caballero Patroclo:
—¡Héctor! Jáctate
ahora con estas altivas palabras,
ya que Zeus el
Cronida y Apolo te dieron el triunfo; 845
… 850
Y otra cosa te
voy a decir y en tu mente consérvala.
Tú no habrás de
vivir mucho tiempo; se acercan ahora
a tu lado la
parca funesta y la muerte, y a manos
morirás del
magnánimo Aquiles, el nieto de Eaco.
…
τὸν δ' ὀλιγοδρανέων προσέφης Πατρόκλεες ἱππεῦ:
ἤδη νῦν Ἕκτορ μεγάλ' εὔχεο: σοὶ γὰρ ἔδωκε
νίκην Ζεὺς Κρονίδης καὶ
Ἀπόλλων, … 845
… 850
ἄλλο δέ τοι ἐρέω, σὺ δ' ἐνὶ φρεσὶ βάλλεο σῇσιν:
οὔ θην οὐδ' αὐτὸς δηρὸν βέῃ, ἀλλά τοι ἤδη
ἄγχι παρέστηκεν θάνατος καὶ μοῖρα κραταιὴ
χερσὶ δαμέντ' Ἀχιλῆος ἀμύμονος Αἰακίδαο.
…
Ilíada, XVI, 843 ss. (Traducción de E. Crespo Güemes)
NICHOLSON/GITTES-EDIPO:
Porque el detective
se adentra en el mundo de laos grandes y corruptos ricachones de l poder, como
el Edipo joven que debe desentrañar el enigma de la esfinge, el caso para el
que lo han contratado.
Después de serle desvelada la
incestuosa verdad que sobrevuela el asunto, como Edipo, descubre otra verdad.
La historia se repite, repite desolado.
Sin él quererlo directamente,
como el personaje trágico griego, ha conducido a la muerte a su amante
Dunaway-Yocasta, y ha roto la huida hacia la felicidad de aquella pequeña
familia.
YOCASTA-DUNAWAY
La película pone en boca de
Dunaway el desvelamiento de la verdad de su relación entre ella y su aparente
hermana.
Es una de las
escenas culmen del film, una especie de anagnórisis.
La chica que
misteriosamente tienen protegida en una casa particular es su hermana. A
Nicholson no le satisfacen las explicaciones que le da. Sospecha algo más.
En la segunda
visita que le hace, observa que Dunaway se disponer a salir de la ciudad.
Va a buscarla
donde tienen a la supuesta hermana.
Es entonces
cuando la obliga a decirle la verdad de esa extraña joven.
En este papel
parece Dunaway-Muwlray un personaje de una tragedia griega.
En esos
momentos se convierte en la Yocasta de la antigua Tebas. Bueno, en la
Yocasta que pudo haber pronunciado estas palabras, pero no lo reprodujo así el
trágico.
Nicholson-Gittes
la abofetea en la cara con la mano abierta, obligándola a decirle la verdad. A
cada golpe, ella le responde con una respuesta diferente.
Que al final
son dos respuestas, que se repiten alternativamente.
Dos repuestas
distintas que son a misma verdad al mismo tiempo.
¡Es mi
hija! ¡Es mi hermana! ¡Es mi hija! ¡Es mi hermana!... ¡Es mi hija y es mi
hermana!”.
https://www.youtube.com/watch?v=ikjrbBtF5wk
EVELYN
I'll tell you the
truth...
Gittes smiles.
GITTES
That's good. Now what's
her name?
EVELYN
Katherine.
GITTES
Katherine?... Katherine
who?
EVELYN
She's my daughter.
Gittes stares at her. He's
been charged with anger and when
Evelyn says this it
explodes. He hits her full in the face.
Evelyn stares back at
him. The blow has forced tears from
her eyes, but she makes
no move, not even to defend herself.
GITTES
I said the truth!
EVELYN
She's my sister.
Gittes slaps her again.
EVELYN
She's my daughter.
Gittes slaps her again.
EVELYN
My sister.
He hits her again.
EVELYN
My daughter, my sister.
He belts her finally,
knocking her into a cheap Chinese vase
which shatters and she
collapses on the sofa, sobbing.
GITTES
I said I want the truth.
EVELYN
(almost screaming it)
She's my sister and my daughter
https://imsdb.com/scripts/Chinatown.html
A
continuación, Nicholson-Gittes cae en la cuenta de lo que, en lenguaje
contradictorio y absurdo, le ha estado repitiendo mientras la abofeteaba, es la
verdad.
Luego, Dunaway-Muwlray
le cuenta el origen violento del que ha procedido toda esta situación.
Situación opresiva de la que quiere y está a punto de abandonar. Si los hados la
dejan.
Pero no, los
hados, funestos y opresores en este caso, han cado, sobrevuelan el mundo de los
mortales. Cualquier intento de escapar a ellos es imposible e inútil, bien lo
sabe al final Nicholson-Gittes.
La maldición
de ciertos lugares como la del barrio chino, Chinatown, el poder omnímodo de
los corruptos poderosos, asfixian la vida de cualquier humano que intenta
siquiera intentar una escapatoria arriesgada y por muy inevitable a que haya
llegado la situación, que no quepa otra salida.
EDIPO DESCUBRE EL INFAME ACTO DE SU VIDA
En la tragedia
Edipo Rey, del dramaturgo Sófocles, la revelación de la verdad no se produce de
boca de la mujer, Yocasta.
De forma
indirecta, primero el coro, luego Edipo, y luego un mensajero, cuenta la muerte
de aquella que se suicida desgarrada por el dolor.
Y Edipo,
sufriente de forma igual, se ciega precisamente con la hebilla del traje de Yocasta
suspendida de una cuerda. Entre lamentos y súplicas, expresan la verdad de los
hechos incestuosos.
Es similar en
la película y en la tragedia, el asunto lo lleva de suyo, el juego
ambivalente de palabras, la expresión contradictoria y paradójica,
pues los hechos lo son, de la realidad de lo sucedido.
Es decir, de
la confusión entre madre e hija al mismo tiempo en Chinatown, de padre,
hijo, hijos y hermano de la misma forma en Edipo.
En Chinatown
es más sintético, breve, directo; en Edipo es indirecto, demora la confesión,
se mezcla con el castigo que se autoinflige el propio personaje, en una
metáfora muy expresiva de loque es verdad y apariencia, vista y verdad.
Edipo
rey, 1205 ss.
Est. 2
…
Dolor por el glorioso Edipo,
a quien un vasto puerto
ha bastado él solo
como hijo y como padre, ¡como esposo!
¿Cómo el campo sembrado por tu padre te pudo soportar
tanto tiempo en silencio, desgraciado?
Ant. 2
Te ha descubierto el tiempo omnividente;
ha juzgado a la boda que no es boda, en que uno mismo
es padre e hijo.
ἰὼ κλεινὸν Οἰδίπου κάρα,
ἦ στέγας λιμὴν
αὑτὸς ἤρκεσεν
παιδὶ καὶ πατρὶ θαλαμηπόλῳ πεσεῖν;
πῶς ποτε πῶς ποθ᾽ αἱ πατρῷαί σ᾽ ἄλοκες φέρειν, τάλας, [1210]
σῖγ᾽ ἐδυνάθησαν ἐς τοσόνδε;
ἐφηῦρέ σ᾽ ἄκονθ᾽ ὁ πάνθ᾽ ὁρῶν χρόνος,
δικάζει τ᾽ ἄγαμον γάμον πάλαι
τεκνοῦντα καὶ τεκνούμενον. [1215]
MENSAJERO 2º:
… ha muerto nuestra reina Yocasta.
CORIFEO —
¡Infortunada! ¿Por qué causa?
MENSAJERO —
A manos de sí misma …
Lloraba por su lecho, donde, dos
veces desgraciada, dio a luz de un marido otro
marido, e hijos de hijos.
Ἐξάγγελος
τέθνηκε θεῖον Ἰοκάστης κάρα. [1235]
Χορός
ὦ δυστάλαινα, πρὸς τίνος ποτ᾽ αἰτίας;
Ἐξάγγελος
αὐτὴ πρὸς αὑτῆς…
γοᾶτο δ᾽ εὐνάς, ἔνθα δύστηνος διπλοῦς
ἐξ ἀνδρὸς ἄνδρα καὶ τέκν᾽ ἐκ τέκνων τέκοι. [1250]
…
EDIPO—
No habría sido asesino
de mi padre, ni esposo
de la que me dio el ser.
Οἰδίπους:
οὔκουν πατρός γ᾽ ἂν φονεὺς
ἦλθον οὐδὲ νυμφίος
βροτοῖς ἐκλήθην ὧν ἔφυν ἄπο.
…
EDIPO
… ¡Oh boda, boda, me diste el ser y luego me diste
hijos a mí y diste a luz padres, hermanos, hijos,
sangre de familia, desposadas, mujeres, madres y
cuantas cosas más vergonzosas tienen lugar entre
los hombres!
Οἰδίπους
… ὁποῖ᾽ ἔπρασσον αὖθις; ᾧ γάμοι γάμοι,
ἐφύσαθ᾽ ἡμᾶς, καὶ φυτεύσαντες πάλιν
ἀνεῖτε ταὐτοῦ σπέρμα, κἀπεδείξατε [1405]
πατέρας, ἀδελφούς, παῖδας, αἷμ᾽ ἐμφύλιον,
νύμφας, γυναῖκας μητέρας τε, χὠπόσα
αἴσχιστ᾽ ἐν ἀνθρώποισιν ἔργα γίγνεται.
…
EDIPO
… Pues, ¿qué desgracia falta? Vuestro padre
dio muerte al suyo; y tuvo hijos de aquella que le
dio a luz y os engendró en aquella de la que él
nació.
Οἰδίπους.
τί γὰρ κακῶν ἄπεστι; τὸν πατέρα πατὴρ
ὑμῶν ἔπεφνε· τὴν τεκοῦσαν ἤροσεν,
ὅθεν περ αὐτὸς ἐσπάρη, κἀκ τῶν ἴσων
ἐκτήσαθ᾽ ὑμᾶς, ὧνπερ αὐτὸς ἐξέφυ.
Edición de Gredos, texto y traducción.