sábado, 15 de noviembre de 2025

IN MEDIAS RES vs. FLASH-BACK

 


TOLLERE FILIAM EN EL WESTERN. CENTAUROS DEL DESIERTO

 


LA RESIS DE IFIGENIA EN TÁURIDE, EL MOSAICO DE AMPURIAS Y LAS BODAS DE SANGRE

 


SÓFOCLES EN EL PLANETA DE LOS SIMIOS

 


EL PRÓLOGO DE LAS BACANTES, DE EURÍPIDES

 


PSIQUE VESPA: PRESNTACIÓN

 


POETICAE TEMPESTATES (IA).

 


TEMAS POPULARES EN LA LITERATURA CLÁSICA Y EL CINE: AMORES ENTRE TORMENTAS

 


THE MAN WHO SHOT DARÍO III CODOMANO.: LA BATALLA DE GAUGAMELA, DESDE LOS TEXTOS DE LA ANTIGÜEDAD A LOS FIL

 


PRESENTACIÓN: EL MONÓLOGO EN LOS PRÓLOGOS DE EURÍPIDES

 


OPPENHEIMER: EL TITÁN PROMETEO vs. EL PRÍNCIPE ARJUNA

 




pdf ALEJ…, no, ARRIDEO EL MAGNO: UN ALEJANDRO DESCABEZADO Y UNA VICTORIA CASUAL EN GAUGAMELA

 


viernes, 14 de noviembre de 2025

pdf ALEJANDRO Y GAUGAMELA EN EL CÓMIC

 


GAUGAMELA EN LA SANGRE DEL PADRE, DE A. GOIZUETA

 


ALEJANDRO vs. DARÍO EN GAUGAMELA

 


GAUGAMELA EN MANZANARES EL REAL Y RASCAFRÍA, MADRID: ALEJANDRO el MAGNO, DE R. ROSSEN (1956).

 


UNA ABRUPTA Y MONTAÑOSA GAUGAMELA: LA VERSIÓN ANIMADA DE ALEJANDRO MAGNO, 2006. (IA)

 


IFIGENIA EN EL CÓMIC TROYA. EL PUEBLO DEL MAR.

 


DE SICILIA, s.I A.C., A HOLLYWOOD: EL CINEMATOGRÁFICO RELATO DE GAUGAMELA EN DIODORO SÍCULO, BIBLIOTHECA HIST

 


Darìo con la askara en Gaugamela: La conquista de Alejandro, de S. Pressfield, 2004 (IA)

 



ALEJANDRO, CONQUISTADOR DE UN IMPERIO (1993): G. HAEFS, EN LA ESTELA DE FLAVIO ARRIANO.

 



domingo, 9 de noviembre de 2025

NAGNAÓRISIS DE CINE, CÓMIC DE IA

 






AI-poster: ALEJANDRO Y DARÍO SE DISPUTAN EL MUNDO: LA BATALLA DE GAUGAMELA EN LA MINISERIE ALEJANDRO. LA CREACIÓN DE UN DIOS (2024).

 



POETICAE TEMPESTATES: SEIS DÍAS, SIETE NOCHES (1998).

Los lugares comunes de la isla desierta, el, o los náufragos robinsonianos, (aunque, en este caso, son viajeros en avión, dos, no uno, que aterrizan en una isla desconocida), la tormenta que lleva a un otro mundo, estos y algunos temas más, se reúnen en esta entretenida película de hace unos años, y que tuvo cierto éxito en los años noventa.

El título, Seis día y Siete noches hace alusión a los días que andan perdidos, en una isla deshabitada y desconocida. 

Anne Heche, la protagonista, y su novio, David S., se prometían unos idílicos días en una de las isls de los Mares del Sur, del Pacífico, la ficticia Makatea. Pero una llamada imprevista interrumpe el inicio de estos días de felicidad. Tiene que coger una avioneta de forma urgente para regresar a Nueva York en una visita relámpago de trabajo.

Las cosas no saldrán como se pensaba. La destartalada avioneta que la lleva, pilotada por un brusco Quinn-Ford, debe regresar a mitad del vuelo, en vista de unas peligrosas tormentas que se arremolinan en el trayecto.

 


La tempestad supone el paso del espacio "normal", al otro mundo, ficción de la ficción, donde todopuede suceder.
Según giran para regresar, se ven rodeados por otra tormenta más, por lo que Quinn, desesperado, busca un lugar donde aterrizar. Milagrosamente, entre el manto de nubes, descubre la playa de una isla en medio de la oscuridad. Hacia allí y sin pensárselo dirige el achacoso biplano. Cuando enfila a oscuras la playa de cocoteros de la sala, el tren de aterrizaje se rompe por un pedrusco.


De tal manera que sin poder volver a despegar, con la radio rota y sin poderse comunicar, van a tener que esperar mucho tiempo, no se sabe hasta cuándo, para salir de aquella paradisíaca y al mismo tiempo terrible y solitaria isla.

Es, por tanto, a merced de la tormenta, cuando se produce, como en otros casos, un giro físico espacial y un cambio de lugar simbólico.

Por decir lo de casi siempre, como referente clásico a estas extraordinarias tormentas metafóricas, tenemos una buena colección de ellas, y que marcan, si lo vemos así, el ritmo de la obra, en la misma Odisea de los inicios de nuestra literatura.
Nos encontramos, aunque el escenario de la película sean a su vez islas, las paradisíacas y también idealizadas islas del Pacífico, nos encontramos ahora en un nueva isla, otra, pero totalmente diferente a las de la ficción principal.

Esta isla no tiene nombre, es pequeña, muy boscosa, con una idílica playa. Y allí, como en otras historias similares, se cambia de lugar simbólico y ficticio. Estamos en la ficción dentro de la ficción, en Otra isla, en el Otro Mundo, el de la ficción..

Las características de esta isla y de sus protagonistas, como hemos comentado antes, son ya conocidas por otras historias similares. 

Nos encontramos con el tema del robinsonismo, para empezar. Aunque aquí tenemos una chocante y simpática versión. El Robinsón ahora son dos personajes, un piloto hosco que vive a su modo en las islas, y una urbanita y elegante editora de revistas de Nueva York. Los choques entre uno y otro, con momentos tensos y de ironía, añaden unos matices divertidos a esta situación robinsoniana.


Para lo que a nostros nos trae más a cuento, vemos otra vez como se utiliza el recurso de la tormenta, esto que se ha llamado POETICAE TEMPESTATES, para cambiar de escenario, y escenario no sólo físico, sino simbólico. La tempestad marca un paréntesis en el relato, y en la historia personal de los personajes. Es lo que permite a la película, sin darnos cuenta, hacernos pasar de un escenario a un otro mundo, el mundo de la ficción (sobre la ficción en que ya estamos). Es el otro mundo, aquel donde puede pasar de todo, y todo se subvierte.

Y más, también, por la condición de sus protagonistas, que tienen que sufrir el contraste de sus modos de vida habituales y acomodados, con el enfrentamiento radical al nuevo lugar y sus ásperas condiciones. Una isla solitaria, con escasos recursos, donde ellos han de solucionar la vida lejos de las facilidades del mundo habitual.

Es decir, la tormenta es el elemento del relato que permite este cambio de escenario, y que hace dar un giro a la historia lineal que hasta ahora se está contando. 

Entramos, de golpe y de forma totalmente abrupta, en el otro mundo, ajeno y contrapartida del mundo habitual y normal en el que, hasta entonces, habían pululado y transitado su rutinaria vida estos dos personajes de esta agradable comedia.


POETICAE TEMPESTATES EN LA ODISEA SEGÚN LA IA GOOGLE

 Las tempestades en la Odisea son causadas principalmente por la ira de los dioses y la codicia de la tripulación, y se manifiestan en eventos clave como la liberación de los vientos por parte de la tripulación al abrir el odre que les regaló Eolo, y la lucha contra el remolino de Caribdis y el monstruo Escila. Estas tormentas representan un obstáculo constante para el viaje de Odiseo de regreso a Ítaca. 

Tormentas causadas por la acción de los dioses y la tripulación 
  • La tormenta provocada por Eolo: Tras recibir ayuda del dios de los vientos, Eolo, los hombres de Odiseo abren un odre que contenía todos los vientos en un acto de codicia, creyendo que contenía oro. Esto desata una tormenta violenta que los aleja nuevamente de su patria, provocando la ira de Odiseo por la falta de control de sus hombres.
  • Eventos desencadenados por la intervención de los dioses: La historia de Odiseo está llena de tormentas y peligros marinos, a menudo impulsados por la intervención de los dioses. Por ejemplo, después de que Odiseo y sus hombres sacrificaran las vacas del dios del Sol, Helios, este último pide a Zeus que los castigue, lo que resulta en una tormenta que destruye su barco. 
Tormentas y peligros naturales
  • Escila y Caribdis: Al evitar el remolino gigante de Caribdis, que amenazaba con tragar su barco entero, Odiseo se ve forzado a navegar cerca del acantilado donde se encuentra Escila, una bestia monstruosa de seis cabezas. En el intento de pasar, esta bestia devora a seis de los hombres de Odiseo.
  • Las sirenas: El canto de las sirenas que seduce y desorienta a los marineros, y el intento de los hombres de Odiseo de resistir la tentación, a menudo se presenta en la obra en relación con tormentas. 
Las tormentas y los peligros marítimos son un elemento central de la épica homérica y simbolizan los desafíos que Odiseo y sus hombres deben superar en su larga y ardua travesía de regreso a casa. 

sábado, 8 de noviembre de 2025

CÓMIC DE LA IA

 








LA TRANSMISIÓN DE LOS TEXTOS EN LA ÉPOCA BIZANTINA




SORTES VERGILIANAE EN EL SALVAJE OESTE: PRESENTACIÓN EN IA

 


ALGUNAS REFERENCIAS DE HERODOTO EN LA LITERATURA Y EL CINE (IA)

 





LA MINISERIE ALEJANDRO MAGNO (DE LA HISTORIA AL MITO) (2014). UNA VISIÓN TRADICIONAL DE ALEJANDRO Y DARÍO EN GAUGAMELA. (IA)

 


LA LITERATURA COMO PHARMAKON: CÓMIC POR IA

 





IFIGENIA ENTRE LOS ... NAZIS: CÓMIC POR IA

 







martes, 4 de noviembre de 2025

LA NOCHE BOCA ARRIBA EN LA HIJA DE AGAMENÓN.

 LA NOCHE BOCA ARRIBA



En algún momento de la lectura y relectura del relato, y, sobre todo, de los capítulos dedicados al mito de Ifigenia, la novelita llega a ser tan concentrada que en algún momento nos recordaba a este relato clásico de J. Cortázar de los años setenta, La noche boca arriba.

En efecto, en este cuento breve, Cortázar nos narra dos historias en paralelo y ligadas entre sí en la figura de un mismo personaje. Se trata de un paciente que sufre de dolencias en la cama de un hospital, pero que, en sueños, figura ser un guerrero azteca que es acosado por sus enemigos.

De esta forma, se rompe la linealidad del relato, se confunden las coordenadas espacio-temporales, y le da una riqueza, complejidad y mayor expectación para el lector a su narración.

Algo parecido ocurre en el relato de Kadaré, al tanto de las vanguardias literarias de su época.  Aunque en LHDA predomine la narración de la opresión moral  y cultural de la innombrada Albania, el episodio de Ifigenia es relatado con mucha intensidad y detalle. El ir y venir de esta innombrada Albania del siglo XX a la mítica Áulide del segundo milenio a.C., hace que llegue un momento en que no sepamos dónde nos encontramos realmente.

Esto es una exageración, desde luego, y en ningún caso llega al extremo literario del relato de Cortázar, siempre se mantienen las dos realidades históricas bien diferenciadas.

Pero, sobre todo, cuando está relatando el episodio de Áulide, en verdad que a veces no sabemos si ese otro narrador que está allí, en virtud de la técnica del monólogo interior, no sabemos si es un guerrero aqueo más, el propio periodista transmutado que lo relee y reinterpreta, o un viajero del tiempo encarnado en un guerrero anacrónico recién llegado allí.

Y, de algún modo, esta nueva versión del mito que redacta, la leyenda de Ifigenia adquiere visos de una mayor veracidad y de verosimilitud que, en gran parte, la hace apartarse de una aparentemente simple y simbólica ficción mitológica. En la versión de Kadaré, pasa a convertirse en una relato descreído, crítico, despojado de su aura legendaria. Se ha convertido, en su reescritura, en un relato documental casi histórico y ciertamente desmitologizado, pues tal es la exigente credibilidad con que lo reinventa y versiona de nuevo, y la reinterpretación en clave ideológica que hace del mismo.


HOMERO YA ESTUVO EN GAUGAMELA