KADARÉ Y EURÍPIDES, Y A LA VICE CONTRA: MYTHOS vs. LOGOS. EL TRÁGICO DISIMULADO. (7.3).

KADARÉ Y EURÍPIDES, Y A LA VICE CONTRA: MYTHOS vs. LOGOS. EL TRÁGICO DISIMULADO.

Como ya hemos comentado en algún momento, Eurípides, su obra y su pensamiento es el autor que se encuentra tras esta pequeña obra de Kadaré. Tampoco tiene que ser una relación directa, ni mucho menos, pero en el racionalista dramaturgo del siglo V a.C. ya encontramos de forma manifiesta la crisis del mito tradicional, al contrastarlo con el logos racional que aporta la Sofística en la Ilustración de Atenas.

Uno de los ejemplos más claros, de los tantos que se encuentran en la literatura de esta época, de esta confrontación mito vs. logos lo encontramos en la tragedia Electra. Se trata de la conocida escena de anagnórisis o reconocimiento que se produce en el episodio segundo. El anciano cuidador de Electra, que ha visitado la tumba del rey, llega a la casa de Electra dominado por la excitación. Alguien, que no puede ser de Micenas, ha estado en el túmulo y ha dejado unas señales de devoción. El anciano está convencido de que no puede ser otro que Orestes, el hermano de Electra, y por cuya espera aguardan con desesperación día tras día.

Electra, en un alarde  de desmitificación y de argumentación racional, desbarata esas señales que ha visto en la tumba, como si fuera un detective perspicaz.

La escena de anagnórisis, pues, que se venía transmitiendo en las obras de al menos Esquilo y Sófocles, que sepamos, es hasta parodiada por Eurípides.

Kadaré, sin llegar a ese extremo quizás, rememora a este Eurípides intertextual, que está detrás de la tramoya de su texto, y hace lo mismo con o que ahora , en el caso de Ifigenia, son las supuestas razones, alegadas por la tradición mítica, justifican el acto ritual para que las naves zarpen de Áulide, rumbo a Troya.

Así, una tras otra, en un proceso de argumentación retórica, va rebatiendo estas noticias de la leyenda tradicional de Ifigenia. 

Y, además, estableciendo al mismo tiempo una relación directa con la situación vivencial del personaje y su amante Suzana, y la realidad política totalitaria de esa Albania presupuesta.