domingo, 10 de marzo de 2024

Espartaco y el valor de la poesía en Pro Archias.

Ya se sabe que Espartaco, el film de S. Kubrick centrado en la reivindicativa figura del gladiador rebelde, tienen una marcada temática social, envuelta en las togas, los pepla y las caligae propias del mundo antiguo.

También se ha visto que el aspecto religioso en el film apenas hace acto de presencia, lógico por otra parte. Cuando lo hace, como en la escena del senador Graco comprando uno pollo para un sacrificio, deja a las claras el descreimiento, también de los propios romanos, la clase alta, ante los ritos y prácticas religiosas.

     En la escena que se ve arriba, es quizás el momento que más cerca está el film y el personaje de acercarse al mundo espiritual de la vida. Lo hace, claro, no por un sacerdote, sino por un poeta, quienes eran ya en la antigua Grecia los inspirados por los dioses, pues los sacerdotes como tal no tenían la misión que hoy entendemos como tal

Espartaco, que al principio no había entendido el papel de la poesía en el mundo, en su nueva comunidad, de pronto queda arrobado, como sus compañeros, por la poesía que comienza a recitar el poeta Antonino en la reunión.

Es cuando descubre como quien dice, el valor de la poesía y las humanidades y el conocimiento.

Luchar, que es paradójicamente lo que desea Antonino, luchar lo puede hacer cualquiera. No, Antonino, tú debes seguir con tu papel de poeta, ese rol que hasta no hacía mucho el líder gladiatorio no entendía.

 

En esta escena es cuando se recurre como hemos visto a la defensa de las humanidades, como Cicerón en su discurso Pro Archias. Espartaco, y también Varinia, su pareja, aunque esta ya lo tenía asimilado desde siempre, le relata un mito, etiológico del rigen del viento, al asombrado gladiador en la escena, descubre el mundo que hay más allá de las luchas y los conflictos humanos.

Espartaco y Varinia hacen un canto al valor de la poesía y el conocimiento, embriagados y deslumbrados del poder y las facultades humanas. Reivindican su ansia de saber y conocer, de sentir, de recrearse y encontrar una vida plena al lado de la cotidiana y presente, tan necesaria como ésta.

Como decimos, en estas escenas es donde más cerca está el film de la esfera espiritual y creativa, pues el marcado aspecto social se sobrepone a todo.

Es un tema de corte clásico, introducido en un film magistral donde aparecen detalles y asuntos de la existencia humana a cada momento.

EL POEMA DE ANTONINO.

Cuando el resplandeciente sol desciende en el cielo de poniente,

Cuando el viento languidece poco a poco en la montaña,

Cuando la canción del ave de la pradera cesa,

Cuando el grillo del campo calla en la llanura,

Cuando la espuma del mar duerme como una doncella que reposa,

Y el ocaso roza el borde de la madre tierra, retorno al hogar.

A través de las azules sombras y los bosques púrpuras, retorno al hogar,

Regreso al sitio donde nací a la madre que me engendró y al padre que me enseñó.

Hace mucho, mucho tiempo, estoy solo ahora, en un mundo remoto, ancho e incierto.

Sin embargo, cuando el resplandeciente sol desciende,

Cuando el viento languidece poco a poco,

Cuando la espuma del mar duerme,

Y el ocaso roza el borde de la madre tierra, retorno al hogar.

 De momento, no sabemos a quién corresponde la autoría de estos versos, si al H. Fast, Dalton Trumbo o a alguien más. Son los que dejan deslumbrados en los fatigados y tensos esclavos, en uno de los pocos momentos de tranquilidad que tienen. El caso es que todos escuchan embelesados estos versos y momentaneamente, los alejan de la cruda vida que están viviendo.

Es precisamente este valor curativo, de fármakon, de recreo y solaz placentero también, el que procuran el ejercicios de estas artes las que reclama el gladiador para su nueva comundad de libertad.

 


No hay comentarios:

Publicar un comentario

IFIGENIA EN EL CÓMIC.

 Buenas tardes: Versión algo más completa de Ifigenia en el cómic, ya subido hace un tiempo.