viernes, 5 de diciembre de 2025

UN DÍA DE FURIA: UN DESQUICIADO ULISES YA NO PUEDE VOLVER A CASA.

 Un día de furia, Falling down, 1993, es un film excelente de Joel Schummacher, de hace ya unos cuantos años. Se podría haber subtitular también como la Odisea de un Ulises del siglo XX, neurótico y desquiciado, con orden de alejamiento, además, que no puede regresar donde su Penélope.

Es más, esta Penélope, lo rechaza, le impide que regrese, le suplica que no vuelva a casa, en verdad le tiene miedo, pues lo suyo ya ha terminado y de muy mala forma.

Pero Ulises-Douglas, Bill Foster, un personaje trastornado, enfermo mental, pero que podríamos decir que su enfermedad es de origen social, reflejo de la neurótica sociedad nortemaericana en la que vive.  Éste nuevo y distorsionado Ulises, pues, este antihéroe, en pleno atasco de una de las autopistas, desquiciado, abandona su vehículo y decide de un arrebato, hastiado, regresar a casa, a su casa, andando, atravesando los tramos de ciudad que lo separan de su perdido hogar.

Bueno, de lo que había sido su hogar. En realidad, el matrimonio entre Ulises-Douglas y Penélope- Barbara Hershey, por el trastorno de él, se rompió, viven ya separado, y ella se ha quedado con su pequeña hija. Pero en la mente trastornada de Douglas, ella sigue siendo su esposa, quiere ver a su hija, es el cumpleaños, y quiere regresar a casa, al hogar, al que fue el suyo en una época, y del que, en ese trance mental que está padeciendo, no ha salido todavía.


Con el recurso narrativo del viaje, de una road movie, en términos cinematográficos, se nos va relatanado paso a paso la historia, el viaj e de este personaje en la película.

Aunque aquí no hay viajes al exterior maravillosos y aventuras, el viaje es al centro mismo de una megaurbe urbanita, inhumana, descomunal, como la anónima y salvaje Los Ángeles que se nos muestra en la película. Éste es el verdader viaje del héroe desquiciado, un antiviaje, se podría decir.

Pues no hay conocimiento unido al viaje, como es lo que suelo ocurrir y van de seguidos. El viaje está distorsionado por la mente del protagonista, y por la alocada sociedad urbana por la que atraviesa. Si acaso es a los espectadores a los que nos muestra un a verdad, un conocimiento, un tratrato crítico y revelador del mundo en el que nos encontramos. Pero el personaje central, por su trastorno obsesivo, no llega, o quizás si, al final, no llega a reconocer y a reconocerse a sí mismo despues de ese trance viático.

Recuerdo, ahora que escribmos esto, al relato, y también film de los años sesenta, El nadador.

Siguiendo con el recurso narrativo del viaje, de una road movie, en verdad en lugar de ser una road movie clásica, en automóvil, Douglas hace, como los antiguos, todo el trayecto a pie, cruzando calles, barrios marginales y peligrosos, avenidas en obras, tráfico infernal, ... todo en medio de ruidos deshumanizados. El protagonista hace todo el camino, el viaje, a pie.


A su lado, y en vida paralela a la que se nos cuenta de Douglas y Hershey, tenemos al otro protagonista, el policía que se jubila ese mismo día, Prendergast-Duvall.


Este policía, de gran humanidad, perspicacia y paciencia, le ocurre algo parecido a Douglas, pero de otra manera. Él también quiere regresar a casa, con su esposa, con su Penélope. Pero, como si fuera la otra cara de ese mundo desquiciado, su esposa está trastornada desde hace tiempo. 
No superó en su momento la pérdida de su hija, y luego ha llevado una vida apoyada y dependiente emocionalmente siempre en Prendergast, lo que la ha hecho de ella al final una persona déspota, insensible y tremendamente egoísta y recelosa con su marido. 
Prendegast la quiere, y quiere regresar a casa, como todos, pero allí, y sus compañeros se lo dicen, y él lo sabe también, allí le espera un vida no muy dichosa. 
Es un Ulises resignado que, a pesar de poder elegir, ha decidido, "es que la quiero", le dice a su compañera, ha decidido seguir junto a esta Penélope atormentada, que no superó el paso a la vida adulta.


LOS EPISODIOS, como en la Odisea de Homero, POR LOS QUE TIENE QUE ATRAVESAR ESTE DESQUICIADO ULISES SON LOS SIGUIENTES: (la información está tomada en parte de aquí):

1. Douglas-Foster, como si fuera un Ulises mil veces náufrago, abandona, después de que su coche-nave embarranca, y queda varado, podríamos decir, en un atasco monumental en una de las grandes carreteras de acceso a la megalópolis de Los Ángeles.


2. El primer lugar al que se le ocurre ir, acuciado por la sed, es a un autoservicio algo miserable, cuyo propietario es un coreano vulgar que no habla del todo bien el inglés. En su desquicie por los precios, todo se encarece, y es verdad, y una simple Coca-Cola le parece cara, discuten y pelean, y Douglas destroza medio local con un bate de baseball, como si dijéramos, una maza de los antiguos personajes de la leyenda. 
Y con ella, con esa maza como una arma futura, sale del local, rumbo a su casa, siempre con esa idea fija. 

 



UN DÍA DE FURIA: UN DESQUICIADO ULISES YA NO PUEDE VOLVER A CASA.

  Un día de furia , Falling down , 1993, es un film excelente de Joel Schummacher , de hace ya unos cuantos años. Se podría haber subtitular...