Ícaro, Dédalo y Talos: el motivo del vuelo, del ansia del mundo antiguo por volar podemos verlo reflejado en unos cuantos mitos, que nos vienen ahora a la cabeza sin pararse mucho a pensar. De momento lo encontramos reflejado en la historia de Ícaro y Dédalo, Belerofonte y su caballo Pegaso, y en Perseo con sus sandalias aladas. Donde se aprecia más el ingenio constructor humano es en el personaje de Dédalo, uno de los principales ingenieros en el mito. En el caso de Pegaso no está tan detallado el poder imaginativo del ser humano, ni tampoco en las zapatillas aladas, donde su aparición es más propia de un elemento mágico asociado al héroe.

El destino trágico del héroe griego aparece reflejado en las historias de de Ícaro y Belerofonte; ambos sufren un castigo a su soberbia, la hybris de los griega, el querer ir más allá de los límites humanos, en un caso acercarse al sol, en otro acceder a la morada celestial del Olimpo, club selecto y reservado el derecho de admisión sólo a los inmortales. (cont.)