El amigo N., autentico vademecum de una isla en principio tan desconocida como esta, se empeno en guiarnos a unas aguas termales que solo las concocian unos pocos. Asi que fuimos de excursion, ekdromi, para la zona sur de la isla, para el Noto. Llegamos a Ayios Kirikos, era domingo y aquello era un publo desierto. Terazas vacias, el muelle solitario, solo el bienvenido local, kalos elthate sti nisi tou Icariou, y las escultura de bronce con las alas del personaje que da nombre a la isla destacando por encima de todo.
La fuente termal escondida:
N. nos condujo a las escondidas fuentes termales. Lo intentamos por un lado pero la carretera estaba cortada, odos kleistos. Luego fuimos por otro y alcanzamos por fin el lugar. Mas escondido no podia estar. Solo un cartelito, y en ingles, anunciaba el lugar.
El luga por donde salia el agua formaba un pequeno circulito de piedras panzudas donde se podia estar sentado o tumbado en medio del agua, en pleno mar abierto. Ese dia el mar estaba demasiado tranquilo, plano, y nos mecia con amabilidad.
La fuente termal escondida:
N. nos condujo a las escondidas fuentes termales. Lo intentamos por un lado pero la carretera estaba cortada, odos kleistos. Luego fuimos por otro y alcanzamos por fin el lugar. Mas escondido no podia estar. Solo un cartelito, y en ingles, anunciaba el lugar.
El luga por donde salia el agua formaba un pequeno circulito de piedras panzudas donde se podia estar sentado o tumbado en medio del agua, en pleno mar abierto. Ese dia el mar estaba demasiado tranquilo, plano, y nos mecia con amabilidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario