sábado, 27 de abril de 2013

Mi nombre es Nadie, mi nombre es Gladiador: escena de reconocimiento

 

Mi nombre es Nadie, así engaña el astuto Ulises al gigante y salvaje cíclpoe Polifemo. Luego vendrá el momento de descubrir la verdad. Las escenas de reconocimiento ya fueron uno de los recursos más efectivos en el teatro clásico griego. Así se puede ver en los tres trágicos principales en las obras Coéforas y las Electras. El personaje regresa oculto y emboscado a un lugar, muchas veces su lugar de origen, como le ocurre a Ulises y Orestes, o a otro distinto. En Gladiator, el personaje de Máximo ha tenido que esperar más de cinco años para llegar a Roma. Allí cumplirá la venganza que tiene preparada en la figura del emperador Cómodo. Pero hasta tanto eso ocurra, su verdader personalidad ha de estar oculta. Por eso durante todo este tiempo es llamado "hispano" por su procedencia, o "gladiador", como él mismo se llama para no descubrir su verdadero nombre.
En una de las escenas más emocionantes de la película, y recurriendo a un recurso del reconocimiento, ya explotado desde los clásicos, el héroe oculto descubre su verdadera personalidad en esta escena.

NOTA: como curiosidad, antes de llegar a este momento, y en la misma escena, tenemos otro recurso clásico en acción: Máximo intenta atacar directamente a Cómo pero un acontecimiento imprevisto lo detiene. Es el recurso ya empleado en la disputa entre uiles y Agamenón, y que desde entonces se ha venido repitiendo de una u otra forma.

miércoles, 17 de abril de 2013

Adivinanza nº 3: el tema mitológico del anuncio publicitario.




(tomado del blog Helleniká)

Roma y los "antiguos" canarii

Ayer hubo una conferencia en el Museo de Historia de Tenerife por parte de uno de sus conservadores, José Juan Jiménez. Interesa algunos datos que entresaca el autor de fuentes grecorromanas. Entre ellas, un informe de general Cayo Suetonio Paulino, conocido por ser el primer general romano que atravesó la cordillera del Atlas. Fue enviado por el emperador Claudio para sofocar una rebelión de los pobladores de esa zona norteafricana. Los insurrectos, liderados por cierto Adaemon, se retiraron a la cordillera del Atlas, y al año siguiente continuaron la rebelión.
El profesor se sirve de esta expedición militar y los informes que este general envía a Roma para explicar el entorno ambiental rico y variado en el que se movían los supuestos antiguos pobladores de Canarias. Un entorno tan variado que incluye bosques de cedro y animales tan exóticos como leones, elefantes y osos. 
Parte de la información del general fue recogida por esa enciclopedia natural y cultural de la Naturalis Historia, de Plinio. Más información aquí.
De los informes enviados por el general se deducía el interés económico que esta zona podía tener para Roma. Había bosques de maderas bien valoradas como el cedro y la thuya, marfil a partir de los elefantes y fieras, algunas de las cuales pudieron acabar en el Coliseo o en otros anfiteatros del imperio.Más información. Aquí también.